Si estás pensando en renovar tu baño, una de las mejores opciones es cambiar la bañera por un plato de ducha. Además de mejorar la estética de tu baño, también obtendrás mayor funcionalidad y comodidad. En este artículo te contamos las claves de la reforma y sus precios.
Lo primero que debes tener en cuenta es el tipo de plato de ducha que quieres instalar. Hay varios tipos en el mercado, como los de resina, los acrílicos, los de cerámica o los de piedra natural. El precio varía según el material, siendo los más económicos los de resina y los más caros los de piedra natural.
Otro factor importante es el tamaño del plato de ducha. Si quieres aprovechar el espacio de tu baño, lo mejor es optar por platos de ducha pequeños, pero si lo que buscas es mayor comodidad, los platos de ducha grandes son la mejor opción. El precio también varía según el tamaño, siendo los más económicos los pequeños.
Listos para empezar a transformar tu baño
Una vez que hayas decidido el tipo y el tamaño del plato de ducha, es hora de realizar la reforma. Lo primero que debes hacer es retirar la bañera antigua y preparar el espacio para el nuevo plato de ducha. Esto implica trabajos de fontanería, electricidad y albañilería. Es importante contar con profesionales para asegurarte de que todo se hace correctamente y evitar futuros problemas.
El precio de la reforma varía según varios factores, como el tipo de plato de ducha, el tamaño, el precio de la mano de obra y los materiales necesarios para la instalación. En general, el precio oscila entre los 800 y los 1500 euros, aunque puede ser más elevado si optas por materiales de mayor calidad o si la reforma requiere más trabajo del esperado.
Otros aspectos importantes para tener en cuenta
Además de lo que ya se ha mencionado, es importante destacar algunos aspectos adicionales que pueden resultar útiles al momento de llevar a cabo la reforma de cambiar una bañera por un plato de ducha.
Por ejemplo, si el baño es utilizado por personas mayores o con movilidad reducida, es recomendable optar por platos de ducha antideslizantes y con un borde bajo, para evitar caídas y facilitar el acceso.
También es importante tener en cuenta el sistema de evacuación del agua, para evitar problemas de filtraciones o atascos en las tuberías. En este sentido, es recomendable instalar un sifón o un desagüe especial para platos de ducha, que permita una correcta evacuación del agua y evite problemas futuros.
Además, si decides cambiar la bañera por un plato de ducha, aprovecha para renovar otros elementos del baño, como los azulejos o la grifería. De esta forma, podrás conseguir un baño completamente renovado y adaptado a tus necesidades.
En cuanto a la decoración, los platos de ducha suelen ser más estéticos que las bañeras, y ofrecen mayor variedad de diseños y acabados. Por lo tanto, aprovecha para elegir un plato de ducha que se adapte al estilo decorativo de tu baño y que te permita crear un ambiente agradable y acogedor.
En resumen, cambiar una bañera por un plato de ducha es una reforma que puede mejorar notablemente la funcionalidad y la estética de tu baño. Si tienes en cuenta todos estos aspectos, podrás conseguir un resultado espectacular y adaptado a tus necesidades. No dudes en consultar con profesionales para llevar a cabo esta reforma con éxito. En Prada Inmobiliaria te acompañamos siempre.